Lluvia para enfriar edificios en climas áridos Lluvia para enfriar edificios en climas áridos

Lluvia para enfriar edificios en climas áridos

Por: Sarai Coscojuela@Eco_Aliados

La lluvia también puede ser usada para beneficio de los humanos y de una manera ecológica contribuir con el medio ambiente. Se puede generar energía a partir de la lluvia o también concentrarse para enfriar en climas áridos.

Distintos países están creando plantas solares que generan energía y para algunos países es muy beneficios porque cuentan con grandes temporadas con sol, pero hay otras regiones donde la lluvia es predominante. Por esa misma razón unos científicos chinos crearon y diseñaron los Solar-Pluviale, que producen electricidad con la lluvia.

Estos paneles son instalaciones idénticas a las fotovoltaicas actuales que son capaces de transformar la luz solar en flujo constante de electricidad, pero en su recubrimiento cuentan con una capa de grafeno, una sustancia que se forma con el carbono y puede absorber energía de la gota de la lluvia.

Con el grafeno tiene la grandiosa propiedad de nutrirse de energía mediante las precipitaciones y es una material fino y flexible, más resistente que el acero y económico para producir y con una gran conectividad.

Esto se explica también porque las gotas de la lluvia no están formadas solamente con agua, sino que en su composición hay sales, que se disocian en iones positivos y negativos. Estos iones reaccionan en contacto con el grafeno para conformar lo que los especialistas en electrónica de potencia hacen llamar un “súpercapacitor”.

Un techo de lluvia

Otro de los inventos que benefician a las personas y el ambiente con la lluvia, es de los tejados con forma de cuenco para recoger el agua y enfriar de forma natural en climas áridos.

BMDesign propone un diseño para estos climas, es una solución arquitectónica llamada techo cóncavo, que es un sistema de doble techo diseñado para almacenar el agua de la lluvia y así luchar contra la escasez y así conseguir también la refrigeración natural de los edificios.

El objetivo con este techo es que pueda recoger incluso las cantidades más pequeñas de lluvia, que se funden en gotas más grandes. Con un techo cóncavo encima de un techo convexo favorece la refrigeración natural a través del movimiento de la sombra y del viento entre los dos tejados.

La captación del agua está lo suficientemente inclinado para llevar las gotas de lluvia hacia un punto central donde la lluvia se canaliza hasta el sistema de almacenamiento.