La familia (I), por Juan Carlos Escotet (Banesco) La familia (I), por Juan Carlos Escotet (Banesco)

Compartimos las reflexiones que sobre la familia  que Juan Carlos Escotet Rodríguez, presidente de la Junta Directiva de Banesco Banco Universal, compartió a través de su cuenta de Twitter.

 

Posiblemente no hay nada más determinante en nuestras vidas que la propia familia. La familia nos marca para siempre.

 

En el seno de la familia queda definido el nivel de apertura humano y profesional con que enfrentaremos la vida.

 

A la familia corresponde tanto educar en valores como preparar a los hijos para las dificultades de nuestro tiempo.

 

La familia, además de representar una cultura, debe mostrar a los hijos que hay muchos modos de ser familia.

 

La familia de hoy está bajo la exigencia de ser el primer espacio de tolerancia y respeto a lo distinto.

 

Lo esencial de la familia es la ‘solidaridad crítica’: acompañarse siempre, pero siempre en el empeño de mejorar.

 

Corresponde a los padres la responsabilidad de escuchar y hacer posible la conversación clara y respetuosa.

 

No tema que no pueda ser tratado por la familia, si en ella impera el respeto y un ánimo comprensivo.

 

Mensaje primordial a los hijos: que vivir sea, en todo momento, actuar de forma responsable.

 

La escasez de tiempo: una de las amenazas que toda familia debe atender. La lucha por estar juntos debe ser colectiva.

 

Cada familia es una red de horarios distintos. Hay que crear rituales que nos permitan estar juntos, cada vez que sea posible.

 

A los padres corresponde aceptar los cambios vertiginosos en la cultura. No negarlos, sino comprenderlos.

 

Hablar con los hijos. Conversar con ellos desde el primer día. Escucharles. Secretos para una vida armoniosa.

 

La globalización impone a la familia un reto: que ella se mantenga unida a pesar de las distancias.

 

No hay tiempo o inversión más preciosa y rentable que la propia familia. La familia es nuestro lugar en el mundo.

 

Cuando las personas sentimos necesidad de ‘regresar’, en ese deseo está presente u oculta, nuestra familia.

 

Cuidar la familia es cuidar la propia existencia. La familia es nuestra primera y última morada.

 

Cada vez que sea posible, es recomendable que la familia sea tema de conversación. Conversar: rasgo de familia.