Los ganadores y finalistas del 7mo. Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas coinciden en que este premio permite la sinergia entre la nueva generación de poetas, la expresión y la publicación de sus poemas en papel. Así Banesco acompaña la difusión del talento emergente y fomenta la lectura y el conocimiento de autores venezolanos.Banesco Banco Universal -cuya política de Responsabilidad Social Empresarial tiene como pilares el fomento a la educación, la salud y la inclusión financiera de los venezolanos- desde hace siete años es parte de la promoción de la nueva generación de autores a través de su Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas y sus aliados Autores Venezolanos, Team Poetero y Fundación La Poeteca. En esta séptima edición los ganadores y finalistas destacaron el valor que tiene para ellos este espacio de creación poética que celebra la voz de los más jóvenes. Para María Isabel Martín (25 años), residenciada en Valencia, estado Carabobo, este concurso fue una fuente de inspiración: “Es una gran oportunidad compartir espacios con otras voces. Este proyecto es un apoyo que multiplica las voces poéticas y permite la expresión”. Martín consiguió el primer lugar en el 7mo. Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas con el texto “Perdí la lengua de un susto”.
“Perdí la lengua de un susto. Abro la boca y ahora se asoma el corazón, porque de bocados ya no me queda sino el anhelo. La medicina dice que la lengua es un músculo impar [igual a uno], medio [que forma una mitad] y simétrico [de belleza inmutable] y yo pienso, ¿qué cosas tiene la pérdida que la medicina aún no nos dice? El puente de mi boca ahora es desierto de aguas, desierto de besos, desierto de ansias; baja por mi garganta una lluvia de arena”. Este poema, en palabras del jurado, es un texto que reflexiona sobre “la lengua como espacio simbólico de exploración de las potencias del decir”.
“Perdí la lengua de un susto. Abro la boca y ahora se asoma el corazón, porque de bocados ya no me queda sino el anhelo. La medicina dice que la lengua es un músculo impar [igual a uno], medio [que forma una mitad] y simétrico [de belleza inmutable] y yo pienso, ¿qué cosas tiene la pérdida que la medicina aún no nos dice? El puente de mi boca ahora es desierto de aguas, desierto de besos, desierto de ansias; baja por mi garganta una lluvia de arena”. Este poema, en palabras del jurado, es un texto que reflexiona sobre “la lengua como espacio simbólico de exploración de las potencias del decir”.
El 7mo. Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas abrió su convocatoria en abril y la cerró el 1° de junio. En este tiempo recibió 241 postulaciones de jóvenes de 18 y 30 años de edad. El veredicto, publicado el 15 de julio, estuvo a cargo de Sara Uribe (poeta, novelista y crítica mexicana), Lázaro Álvarez (poeta, ensayista y profesor universitario) y Jesús Montoya (poeta, traductor, ensayista). El concurso también es una recompensa para quienes insisten en la poesía como una forma de expresión. Así lo cree Daniel Alejandro Chacón. Él tiene 30 años y está residenciado en Caracas. Tras escribir “Valía” obtuvo el segundo lugar: “Creo que el concurso anima a seguir intentándolo. Para mí la poesía es vida y experiencia, se trata de una flor floreciendo en el asfalto. Es vida en medio de la adversidad”. El jurado considera que Chacón exploró “la reescritura, manifestándose en contraposición a un presente histórico adverso”. En “Valía”, Chacón escribió: “los golpes ya no son tan serios, c. ya no nos sorprenden. son ahora, más bien, como un mandato, aunque seguimos agachándonos como por costumbre, como por reflejo todavía. abrazándonos a las caídas porque no tenemos otra cosa. ni recuerdos, ni herramientas solo postigos empujados al incendio por el placer de las cenizas, la bajedad de los tropiezos (sic)”.Los premiados en el tercer lugar fueron José Luis Glod (27 años) residenciado en San Cristóbal, estado Táchira, con su poema “A T y a los otros” y Juan Diego Fernández Lebrun (25 años) residenciado en Caracas, por el poema “Improvisación 12 (El duende)”.Clara De Lima, finalista con el poema “Rojo”, encontró en el concurso el impulso para explorar por sí misma el mundo poético del que tanto le hablaba su papá. “Es una motivación que creo que hace falta. En este momento hay pocos espacios que den apoyo como La Poeteca y Autores Venezolanos. Es una sorpresa que motiva a continuar escribiendo”, aseguró.Ver su poema publicado en papel mantiene a Ricardo Sarco Lira, finalista, animado. Recuerda que su abuelo fue un poeta que nunca publicó. “Es una oportunidad de aparecer publicado en papel, es algo para lo que todo autor trabaja muchísimo”, dijo. A los cuatro ganadores de los tres primeros lugares del 7° Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas, se le suman dos menciones honoríficas y 31 finalistas.Banesco sigue animando al talento emergente, fomenta la lectura de poesía de autores venezolanos y ofrece un canal de comunicación de los jóvenes con su entorno a través del Concurso Nacional de Poesía Joven Rafael Cadenas. Video de la premiación disponible aquí.
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Desde el año 1998 Banesco mantiene un Programa de Responsabilidad Social Empresarial y Sostenibilidad que promueve la educación y la salud de los venezolanos de la mano de sus socios y aliados sociales, así como el mayor bienestar de sus trabajadores. Sus Informes de Sostenibilidad son revisados desde 2008 por la Global Reporting Initiative (GRI) que recoge las mejores prácticas en la elaboración de estos reportes, de acuerdo a estándares internacionales. Banesco es firmante del Pacto Mundial de las Naciones Unidas desde 2009.[/box]