A casa llena y con un público entusiasta, la Orquesta Latino Caribeña “Simón Bolívar” ofreció un concierto en los espacios de Ciudad Banesco. La agrupación, que se presentó en virtud del convenio entre Banesco y el Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela, hizo un paseo musical por algunas de las más importantes piezas de los ritmos afrocaribeños.
Con el acompañamiento de César Miguel Rondón, autor del Libro de la Salsa, como maestro de ceremonias, la Orquesta dirigida por el maestro Alberto Vergara organizó el concierto en 7 “capítulos” o bloques.
Una amena comparsa fue el abrebocas de que vendría. El show abrió con “Tumbao africano”, de Ray Barretto, y siguió con el “capítulo” dedicado a Tito Rodríguez, en el que fueron interpretadas “El mundo de las locas”, de Aarón Sachs y “Avísale a mi contrario”, del propio Rodríguez.
Para “La sonoridad de Tito Puente” fueron interpretados ” Odisea de Tito”, una pieza del maestro Puente basada en el poema sinfónico “Así habló Zaratustra” de Richard Strauss; y “Que te pedí”, de Fernando Mullens que inmortalizó La Lupe.
Rubén Blades no podía faltar en este recuento de las melodías del Caribe. Así que de “Maestra vida”, la mítica “ópera salsa”, fue presentada “La fiesta”, de Rubén Blades y Willie Colón; y dos piezas que el panameño escribió en solitario “Patria” y “Jiri Son Bali”, que pusieron a bailar al público.
Y el paseo musical llegó al sur del continente. Por Brasil fue incluida “Déjala bailar”, de Chico Buarque y que popularizó Soledad Bravo con arreglos de Willie Colón; y “Giros” de Fito Páez a ritmo de chachachá.
Vergara dedicó el siguiente “capítulo” a los sonidos de la salsa caraqueña. Campanitas de cristal” de Rafael Hernández y original de Los Melódicos, canción que el padre del maestro Vergara interpretó originalmente. Luego fue el turno de los cueros de “Cumaco de San Juan” de Francisco Pacheco y con un solo de tumbadoras empezo “Teresa” de Orlando Poleo.
“Dominicanus benditus est”, fue capítulo en homenaje a Juan Luis Guerra. “Cayo arena” y “En el cielo no hay hospital”, fueron las dos canciones interpretadas.
Y con Cheo Feliciano terminó la fiesta. Con “Ritmo Alegre” y “Medley Joe Cuba”, el público terminó la velada bailando.
Además de la excelente interpretación de los músicos, a lo largo de la noche fue aplaudida la calidad de los cantantes, en especial a Yasmary Márquez y Roimar Guzmán. Asimismo, los bailarines de la agrupación se encargaron no solo de brindar espectáculo sino de poner a bailar a los asistentes.
GALERÍA DE FOTOS
Fotos: Eusebio Montilla/Banesco