Navarro, además del récord de 107 puntos, el espigado jugador de Los Teques, impuso otras dos marcas, como fueron la de 61 tantos en el segundo tiempo y la de 17 tiros libres acertados.
Por Javier González
Poco importó que su divisa quedara fuera de toda posibilidad de subir al podio. Luis Navarro puso a sonar a la selección de Miranda durante el X Campeonato Nacional de Baloncesto en 1957, al imponer récord de 107 puntos anotados durante un encuentro contra la selección de Nueva Esparta disputado en el Nuevo Circo de Caracas, el domingo 11 de agosto de 1957.
Navarro dejó de anidar apenas dos de los 109 tantos con los que los mirandinos vencieron a los insulares, que consiguieron 86 unidades en el choque.
Además del récord de 107 puntos, el espigado jugador de Los Teques, impuso otras dos marcas, como fueron la de 61 tantos en el segundo tiempo y la de 17 tiros libres acertados.
La reseña publicada en el diario “Últimas Noticias”, el lunes 12 de agosto de 1957, indicó que “Miranda, con Navarro en plan grande, se despidió del campeonato nacional acreditándose su tercera victoria en la justa, frente a Nueva Esparta, con pizarra de 109 a 86. Navarro en esta oportunidad logró 45 cestas y 17 tiros libres, para un total de 107 puntos, que supera la antigua marca de Gustavo López de 74 puntos, cifra que totalizara el ex jugador del team de Carabobo en 1951, en el campeonato celebrado en Zulia, frente a Cojedes.”
“El Hueso”, como llamaban a Navarro por su delgada contextura, afirmó después del juego que el equipo de Miranda tenía un plan preconcebido para ese encuentro de despedida del torneo nacional: darle a él el mayor número de pelotas para que tratara de anidar todos los puntos posibles, a fin de conseguir el trofeo de campeón encestador, pues antes de comenzar el encuentro figuraba en el tercer puesto entre los mejores anotadores del campeonato.
De esa manera, Navarro aseguró el liderato. Domingo “Amanezco” Terán fue el otro jugador de Miranda que hizo dos puntos en el desafío.
Al finalizar el choque, Navarro tuvo palabras de agradecimiento para cada uno de sus compañeros.
“Muchas veces ellos (los otros integrantes del equipo) tuvieron cómo tirar al cesto y, sin embargo, prefirieron atrasar la jugada para darme el balón. Además, desde el primer momento sabía que todas las pelotas me serían pasadas en la zona de pívot, para que yo las lanzara al aro”, declaró Navarro, al tiempo que ofrecía otros detalles para justificar la estrategia. “Fue un gesto por demás simpático de ellos. Como sabían que yo estaba de tercero entre los anotadores, quisieron que en esta forma por lo menos un jugador de Miranda tuviera oportunidad de clasificarse campeón anotador. Les estoy muy agradecido. El récord, aún logrado así, no deja de tener valor”.
Nacido en Los Teques, estado Miranda, el 7 de marzo de 1935, Navarro inició su carrera como atleta a los 13 años de edad, en los Juegos Deportivos Estudiantiles del año 1948, compitiendo en las disciplinas de béisbol y voleibol. Dos años más tarde incursionó por primera vez en el baloncesto, defendiendo los colores del liceo Miranda. Entre 1952 y 1957, formó parte de la selección mirandina con sobresalientes actuaciones en competencias nacionales.
También compitió con éxito en la disciplina de softbol en diversas categorías de veteranos y fue destacado dirigente desde la Asociación de Baloncesto como el Instituto Nacional de Deportes regional.
Navarro falleció en Los Teques, estado Miranda, el 30 de agosto de 2015, a la edad de 78 años.